La falacia de estar obligado a tener un sentido de vida arrollador.

Llevo unos artículos escribiendo sobre el propósito de vida.

 

Para ciertas personas, parece que solo valen los propósitos megalodónicos.

De los de perder la vida por el camino, pero dejando una lápida con un epitafio molón.

Obras titánicas como hacer tu propia catedral.

Como casi logró Justo Gallego en Mejorada del Campo.

Imperios desde la nada.

Como Amancio Ortega.

O ser números 1 indiscutibles en sus áreas.

Como Serena Williams o Shakira.

 

Con ese pensamiento, ¿es más fácil o difícil ponerse a ello?

¿Y las excusas?

Más sencillo tirar de repertorio de escapatorias, ¿verdad?

Si un propósito de vida es tan grande, y te haces tamaño Lego, ¿vas a tirar pa’lante?

No habrá “G”. NO vas a Generar la acción apropiada.

¿No será que te estás autoboicoteando?

 

Un propósito de vida, puede ser:

  • Generar una familia armoniosa y feliz.

  • También jubilarte y jugar al golf todas las mañanas del resto de tus días.

  • Incluso, tener tu huertecito y leer por las tardes.

  • Y mil millones más.

 

¿Qué importa lo que sea?

¿Dónde está escrito que tiene que tener una escala, dimensión o tamaño?

 

No te obligan a tener un (posible) motivo para brillar.

 

Que muchas veces la mayor parte del problema es precisamente ese…

Que brillar cuesta.

Que mantenerse encendido y luminoso, exige pagar la cuenta.

Que lo mismo deslumbras a alguien y temes que te aparten.

Que puede que no contemples que ese problema es de los “apagaos”.

De los que ahorran abonar su cuenta y vivir a oscuras.

De los cangrejos que no dejan salir del cubo.

 

Un propósito de vida no se discute a quien lo tiene.

No tenerlo, es una especie de “tenerlo”.

Es como seguir gateando.

Pero si es por elección, tampoco se discute.

Ten en cuenta que si:

  • El que te planteas, puede ser lejanísimo, inalcanzable, loquísimo,...

    👌 Perfecto.

  • Alcanzable, de copia-pega diario, sosegado,…

    👌 Perfecto también.

  • Y así con todos.

    👌 Perfectos todos.

 

No va de poner un juicio, una valoración o un sello de conformidad.

Es tu p*ta vida (y de cada uno), vívela como quieras (cada uno, como quiera).

 

Cuando eres quien mete el palo en tu rueda:

También vale un propósito que sea la miniatura de tus capacidades.

O el que te esculpieron tus padres desde la cuna y que te pese la vida por ello.

Y el de ver toda la programación de Netflix.

Incluso de aquel que presumes en Instagram, pero con el que te engañas, porque te hace infeliz.

Vale todo.

 

Para ti me vale todo.

Algunos proyectos de realización personal me asombran.

Los hay que me agradan.

Otros me hacen inclinar la cabeza a un lado y hacer un ¿ummm?

De ti, para ti, me vale todo.

 

Para mí, no me vale todo.

Desde el cariño que me tengo, quiero la vida que merezco.

Pago por esa luz.

Vivo entre apretarme para conseguir lo que deseo, y cuidarme porque el estrés es una de mis kriptonitas.

Aprieto, aflojo, reajusto, hago que sea más sencillo y vuelta a pedirme más.

De mí, para mí, no me vale todo.

De eso va la “G”.

De Generar.

De hacer que cada día, sea menos apretar y más sistematizar.

De transformar tareas en placeres.

De limpiar auto-boicoteos.

De bajarle grados a la rampa, de conseguir darle sentido a esto que llamamos vida.

 

La G es la tercera letra del acrónimo M.A.G. con el que hago los procesos de acompañamiento. 

Para que te tengas tanto cariño, que lo único que te merezcas sea lo mejor para ti.

 

Si quieres que te cuente más:

  • El paso imprescindible es que te suscribas en la caja de abajo:

    • Al registrarte, podré gestionar correctamente tus datos.

    • Y de paso, no pierdes ningún contenido potente.

  • Luego, me podrás contactar en cualquiera de los correos que te voy mandando y me pones al corriente.

  • Agendamos una videollamada de compatibilidad.

    • Vemos si eres una persona con quien me veo trabajando.

    • Si yo soy el tipo de profesional que necesitas.

    • Y aclaramos dudas.

 

El primer paso: tu mejor email ahí abajo. 

De estar fuera: noticia, consejo o reflexión de desarrollo personal que te pierdes.

¿Te gusta la idea? Apúntate.

¿Qué te deja de gustar? Te das de baja. 

🎁

Puedes compartir por: Comparte por: LinkedIn, Facebook, Twitter, , manda un e-mail ✉️ o directamente copia la dirección del enlace: https://www.manugalan.com/blog-2/falacia-sentido-de-vida-arrollador

Suscríbete, si estás dentro, un par de regalos exclusivos te esperan. Uno no, son dos.

  • ¿Quieres saber en qué área de tu vida está la insatisfacción haciéndose fuerte?

    - Conoce tu situación actual de un solo vistazo.

  • ¿Crees que te entiendes bien con todo el mundo? ¿Y si de paso sirve para el auto-conocimiento?

    - Aprende sobre los 9 tipos de personalidad, con la que mejorar tus relaciones y encontrar tus propios patrones.


Anteriormente, en ManuGalan.com:

Manu Galán

Coach, facilitador y formador en desarrollo personal. Servicios para particulares y empresas.

Https://www.ManuGalan.com
Anterior
Anterior

El cubo de cangrejos. Un síndrome marcado a fuego en los genes.

Siguiente
Siguiente

De no saber priorizar, al autoconocimiento. Un caso de éxito.