Los 4 niveles de competencia y el efecto Dunning-Kruger.
Los 4 niveles de competencia de Noel Burch nos ayudarán a entender el cuñaismo y el bocachanclismo.
Te los cuento:
4. Competencia Inconsciente:
Tienes el conocimiento y lo haces en segundo plano, sin pensar. La habilidad ya está en tu ADN.
Un ejemplo, es conducir cuando ya llevas años de carnet, vas pensando en tus movidas y no lo fuerzas.
3. Competencia Consciente:
Necesitas concentrarte, pero sacas la tarea adelante. Ejerces control, te esfuerzas, secuencias tareas,… Lo sacas, pero te cuesta y por ello puedes creer que sabes menos.
Aquí se encuentra el famoso Síndrome del Impostor. El saberte con falta de experiencia.
2. Incompetencia Consciente:
Sabes que no sabes. Te das quin de lo que te falta conocer y que tienes que mejorar.
Te sitúas en la desesperación o en plan estudiante, para adquirir lo que te falte.
1. Incompetencia Inconsciente:
No tienes ni idea de tu torpeza ni de que no sabes que no sabes y todo lo que te falta.
¿Conoces algún cuñao o bocachancla? De no conocerlo, es que eres tú.
Y te voy a poner un ejemplo que se transformó en el efecto Denning-Kruger.
En 1995, un fulano llamado McArthur Wheeler atracó dos bancos de Pittsburgh a cara descubierta.
Al ir a arrestarlo, alucinaba pepinillos, no entendía como lo habían pillado por las cámaras de seguridad…
Pero si “me había frotado la cara con zumo de limón”.
El muy pardillo se pensaba que eso haría invisible su careto.
En el 95!!!
Los investigadores (Dunning y Kruger) fliparon tanto, que hicieron una investigación sobre los que creen saber y ni fuquin idea: la percepción de la propia competencia.
A los sujetos de estudio, les pidieron que se autoevaluaran y luego pasaron unos test sobre razonamiento lógico, gramática y humor.
Bueno, pues se dieron cuenta que:
Los que se creían más listos, sacaron las peores notas, son ineptos y no se dan cuenta de ello. Para colmo, no reconocen que otros sí lo son.
Esta peña hace limonada de sus limones, sale muy ácida, y dicen de otros no tienen pupilas gustativas.
También se vio que los competentes, se infravaloran. Así es fácil caer en el síndrome del impostor, ¿verdad?
Pues imagina que tratas de explicar, a un tonto motivado, de estos de la cara enlimoná, algo de lo que tú sí sabes.
¿Crees que dará valor a tus palabras?
¿Sentirás que te respeta?
Si fueras de los Lemonheads, ¿cómo dinamitarías el efecto Dunning-Kruger?
• Saliendo en la cámara, como el ladrón de bancos, con algún tipo de test o prueba indiscutible.
• Con un zasca de Vida. Cagarla como Dios manda. Una leche de realidad, de esas que te dejan pajaritos dando vueltas por la cabeza.
• Tener una persona de confianza, que consideres referente en lo que hace, y te diga lo que piensa, para sacarte de tu visión ombliguista.
Y solo para personas suscritas en el cajetín de más abajo:
Si crees que es tu caso y quieres que sea tu persona de confianza, contacta.
Un saludo,
Manu
P.D.1: En algún área, un poco idiotas o monguers somos todos.
Lo malo es cuando te quieren mucho-mucho o poco-poco y no te lo dicen.
Yo te lo diré, dulce y sin miramientos.
P.D. 2: Esto se lo mando a mis suscriptores.
¿Quieres ser de la comunidad y recibir los correos?
De estar fuera: noticia, consejo o reflexión de desarrollo personal que te pierdes.
¿Te gusta la idea? Apúntate.
¿Qué te deja de gustar? Te das de baja.
🎁
Suscríbete, no te quedes fuera. Un par de regalos exclusivos te esperan. Uno no, son dos.
¿Quieres saber en qué área de tu vida está la insatisfacción haciéndose fuerte? - Conoce tu situación actual de un solo vistazo.
¿Crees que te entiendes bien con todo el mundo? ¿Y si de paso sirve para el auto-conocimiento? - Aprende sobre los 9 tipos de personalidad, con la que mejorar tus relaciones y encontrar tus propios patrones.
Anteriormente, en ManuGalan.com
