¿Quieres abrir el coco para salir de un gran bloqueo? Te cuento cómo lo hice.
Tienes una versión en audio bajo estas palabras y, justo a continuación, en texto.
Hago un inciso:
Es difícil contar algo personal, que también afecta a otras personas.
Sin revelar información de otros que no quieres exponer.
De forma deliberada omito aquí una parte que tiene que ver con mi dolor.
Esta historia arranca cuando recibía la fantástica formación DPOP de CIVSEM.
En el momento que escribo esto, colaboro en ella.
El director, Miguel Ángel Velázquez, hablaba del "Viaje". Cerca de 200 almas escuchando.
Bueno, al grano.
Nos contaba que de situaciones difíciles se sacan TALENTOS.
Que de eventos y procesos duros de vivir extraemos FORTALEZAS.
Mi diálogo mental era del tipo:
— ¿Sacar talentos y fortalezas?
— ¿De cosas jodidas?
— ¿Pero qué dice?
— ¿Dónde está la cámara? ¿O el árbol que hay que abrazar?
Por supuesto, estos pensamientos hablaban de mí. No de lo que decía Miguel Ángel.
De mi dificultad,
de mis circunstancias,
de mis aprendizajes,
de mis experiencias,
de mis miedos,
de cómo veía la vida con lo que para mí tiene sentido.
CONCEPTO CLAVE: Mi interpretación.
Estos juicios, sobre lo que escuchaba, se sostienen sobre certezas personales.
Van asociados a una forma de ver el mundo.
Una línea de creencias del tipo:
— "Hay golpes, que te dejan en la lona".
— "La Vida es injusta y te trae dolores incompresibles".
— "No hay nada bueno en lo malo" ...
¿Cómo es que llegué a pensar esto?
Queda claro que hay cosas que te vienen dadas y no las elegirías, en esta vida,
ni en 10,
1.000 o
100.000 vidas.
No las elegirías y punto.
Y además, si pongo de mi parte, con creencias del tipo:
La Vida...
...debería ser justa conmigo (y no con tanta mala gente suelta),
...debería ser lógica (sujeta al causa-efecto),
...debería ser inmutable en "lo bueno" (pero no en "lo malo"),
...debería poder cambiarse cualquier circunstancia (sacar la goma y borrar lo que no gusta),
...debería, debería, debería...
CONCEPTO CLAVE: Falta de aceptación de la realidad, negación de sucesos y del libre albedrío de los demás.
¿Y qué consecuencias estaba teniendo en mi vida?
Una bola de preso,
un ancla,
un hilo atado entre algo del pasado y un gran dolor,
un peso muerto que no me quitaba...
La negación de "lo que es".
No estar viviendo el ahora, por mirar pa’trás.
Años de sufrir.
Estrábico emocional.
De cuerpo en el presente pero con la tensión de aquel pasado.
Con el pensamiento en el ayer y la presencia ausente.
Y el corazón, atascado en el desagüe de la resignación.
Desde el "yo" qué era: ni talento, ni fortaleza, ni pollas en vinagre.
CONCEPTO CLAVE: Lo malo es MALO y punto pelota.
En esto, que un participante sube la mano y toma la palabra:
— Me llamo XXX.
Hace unos años, perdí a mi hija por enfermedad, cuando ella tenía 5 años.
Y de nuevo el parloteo dentro de mi cabeza:
— ¡Toma! ¡Pedazo de testimonio! A ver por donde sales Miguel Ángel.
Como si él tuviera la culpa, de lo que se me mueve por dentro.
Pero vamos, ahí estoy, deseando que me den la razón.
Porque es importante para mí, que lo que pienso y siento siga siendo válido.
Es uno de los pilares de mi estructura.
Es parte de lo que justifica mi comportamiento.
Pero esta persona continúa compartiendo:
— Al principio fue durísimo.
Con mucho tiempo, lo fui llevando mejor.
Y ahora ayudo a otros padres que pasan por el mismo proceso.
Pupilas modo eclipse.
Palabra muda.
Pelo erizado...
¡¡¡BOOOM!!!
Y a tomar por culo una creencia.
Qué digo, la estructura completa de esos juicios.
¿Y ahora qué pasa con los años de dolor?
Con esa manera de proceder acorde a eso.
Si dejo de pensar así... ¿qué hago con la forma de actuar que he sostenido?
La identidad por los suelos.
Como cuando se rompe un coco.
Imposible pegar todos los trozos, nunca volverá a ser lo mismo.
CONCEPTO CLAVE: ¿Hay otras formas de hacer sin aferrarse a lo de fuera o a partes de uno mismo?
Y no es que ese padre diera un testimonio, que por desgracia, sea rarísimo.
Podría haber oído algo similar de otros, en redes sociales, o por la tele,...
Pero como un proverbio chino dice:
"El maestro llega, cuando el alumno está preparado".
Y es que casualidad no fue...
Mi grupo del DPOP era el de la tarde.
Ese día fui por la mañana.
Ningún otro más.
No debería estar allí,
...no debería oír el testimonio de esa persona,
...no debería, no debería, no debería,...
O precisamente era lo que tenía que ocurrir.
CONCEPTO CLAVE: ¿Las cosas difíciles pueden suceder para algo más?
Del viejo pensamiento, al nuevo.
Y aquí voy a tratar de hilar todo lo viejo:
Sucede un evento.
Asignamos una interpretación negativa.
Un dolor, que de poder, no lo elegiríamos.
Al ser algo no deseable, tratamos de luchar contra ello.
Negamos la realidad, nos resistimos, pataleamos y sufrimos.
Revivimos el pasado en busca de soluciones.
Nos quedamos enganchados en lo que debió ser antes o en lo que tendría que ser ahora.
Culpamos a personas, situaciones, cosas e incluso a nosotros.
Encadenarse al resentimiento, a la resignación,... al peso y al bloqueo.
El contrapunto para mí es:
Que los sucesos parecen ocurrir por alguna causa.
Pero no se suele entender en ese preciso momento.
Hay que confiar en que tendrá un sentido en el futuro.
Es normal dar una interpretación negativa a una pérdida, a una transgresión de nuestros derechos, a una agresión,…
y, aun así, hay otras formas distintas de ser, que estar enganchados.
Tratar de salir del bloqueo.
Transitando las emociones.
Aplicar ternura a aquello que aconteció y a uno mismo viviendo el evento.
Queriéndose en esa situación.
Aceptando que eso ya es pasado, y no hay máquina del tiempo.
En este punto se podrá hacer el duelo.
Viendo lo que trae y extrayendo algo constructivo.
Reconociendo el aprendizaje.
Cultivando el talento o la fortaleza.
Desarrollar resiliencia.
Aportando a otros.
Agradeciendo la superación personal y el poder contribuir.
De la colisión estelar salieron dos grandes aprendizajes:
Puedo vivir desde otro punto, un lugar distinto.
A día de hoy, siento haberme quitado un gran peso de encima.
Me dedicaré a poner a disposición lo aprendido.
Lo he transformado en la “M” del método 𝗠𝗔𝗚™️ (M: moviliza tu vida, pon paz en tu pasado para desbloquear tu presente).
Es la primera pieza.
La que te rescata del dolor.
La que me sacó de donde estaba.
También mereces vivir desde otro punto y movilizar tu vida.
Tan pronto como sea posible.
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